domingo, 10 de agosto de 2008

Momentazos fílmicos: Braindead. Tu madre se ha comido a mi perro

Apesta a Excrementos 2, 22 de febrero de 2007.


I kick arse for the Lord!


Antes de convertirse en el monstruo de la taquilla que es en la actualidad, el neozelandés Peter Jackson ("El Señor de los Anillos", "King Kong") firmó algunas de las más desopilantes joyas del gore. Rodaba con sus colegas durante los fines de semana, y de esa forma nos proporcionó a los amantes del género "Bad Taste" o "Meet The Feebles", films de ultraculto para los adictos a la casquería y la hemorragia.
Hace unos años decidió que su etapa como director casposo había finalizado y para despedirse a lo grande filmó su testamento splatter, una película que, por exceso, liquidaba en cierto modo el género: nadie podría hacer algo más desfasado. Aquel pasote se tituló "Braindead" ("Tu madre se ha comido a mi perro", en castellano), y entre otras míticas escenas contenía la que hoy nos ocupa: un sacerdote se enfrenta a las huestes zombies en la que el equipo de AAE considera la mejor escena de curas de la historia del cine (ni Buñuel ni Fellini). Después vendrían estupendas películas de encargo como "Atrápame esos fantasmas" o maravillas poéticas como "Criaturas Celestiales". Un genio imprescindible, el gordito cabrón.

4 comentarios:

Premaswarupa dijo...

Fan del Gore? no te creo...
XDDD!!

besos precioso, desde mi lado de la orilla.

Victoria dijo...

Créele, Premas, créele.

Anónimo dijo...

El amigo Jackson solo se volvería a ganar mi respeto si ahora dijese "bueno, ya estoy podrido de pasta para hacer lo que siempre quise: la segunda parte de Mal Gusto, donde veremos a Derek en el planeta de los alienígenas, destripándoles a golpe de motosierra hasta que no quede uno vivo".

Pero me da a mí que eso no va a pasar.

Anónimo dijo...

Esto ya lo he leidoido.